Convertirte en madre te cambia por completo. Desde que nace tu bebé, no sólo tú no vuelves a ser la misma, si no que tu vida y prioridades toman otro rumbo. Muchas cosas del día a día cambian, sin embargo, algunos de ellos son forzados. En este caso, una de las cosas que más echo de menos es tener un poquito de tiempo para mí, para mis cosas, para cuidarme y mimarme… Sinceramente, antes no pensaba en estas cosas precisamente porque #missOlivia no estaba con nosotros y yo tenía todo el tiempo del mundo para mí, pero desde que ella llegó, tengo un especial antojo por la belleza! Siento que tengo ganas de cuidarme, más de lo habitual, y siempre pienso qué lujo sería poder escaparme de vez en cuando a tener un sesión de belleza con masaje, manicura, tratamientos faciales…

Mientras llego a ese punto de organización -no me queda más remedio que aceptar que queda lejos-, estoy intentando dedicarme algunos de esos ratitos en casa, preparándome mi spa particular y, ¡es más práctico! Un poco de música, unas velas y una bañera llena de espuma es todo lo que necesitas para zambullirte en un oasis de relax aunque en tu casa apenas reine la paz. Y no sólo tengo ganas de mimarme, sino que el contrarreloj para el verano ya ha empezado y, con él, el momento de lucir “piernas al aire”.

Dove DermaSpa es una nueva gama de productos de Dove orientados en esta línea del cuidado corporal, pero con mucho mimo. Podéis encontrar 4 colecciones diferentes: Goodness³, Uplifted+, Youthful Vitality y Summer Revived. Lo novedoso de esta gama es que incorpora los avances de cuidado facial a productos de cuidado corporal gracias a su tecnología Cell-Moisturisers, que ayuda a estimular la renovación natural de las células de la piel para conseguir una piel hidratada en profundidad.

Lo primero que me ha llamado la atención de esta nueva gama es que han cuidado todos los detalles, incluido los aromas de los productos, algo fundamental cuando quieres sentir ese plus que los spa ofrecen. Mi colección favorita es Goodness³, que está pensada para transformar la piel seca en una piel aterciopelada, luminosa y de aspecto uniforme. De todos los productos que componen esta línea, me quedo sin duda con el aceite corporal porque es una pasada. En invierno me vuelvo más perezosa y prefiero el formato loción hidratante o body-milk, en cambio en verano me decanto siempre por aceites ya que, además de hidratar la piel, dejan un brillo muy favorecedor que realza el moreno. Este aceite tiene un olor MARAVILLOSO. Una deliciosa fragancia de vainilla, coco y almizcle con notas de cítricos, jengibre y manzana, combinada con un sofisticado toque de fresa y frangipani. Estoy segura que el paraíso debe de tener un olor similar ;) No sólo el olor perdura en la piel todo el día, sino que es de rápida absorción, algo que pedimos a cualquier aceite para que resulte práctico.

También estoy probando el sérum corporal de la gama Uplifted+, pensada especialmente para mejorar la firmeza de la piel y devolver la elasticidad a las zonas más rebeldes. Tiene una fragancia de nenúfares y pepino realzada con hojas de violeta y combinada con madera de sándalo, pachulí y almizcle dulce. ¡Un olor riquísimo también! Además, me gusta mucho la sensación del gel frío y su formato de aplicación con el cabezal con 3 bolas, ayuda mucho a recrear la sensación de Spa. Creo que el próximo día le pediré a Salva que me lo aplique él y así yo cierro los ojos mientras ;)

Bromas aparte, es fundamental saber buscar ratitos para nosotros, tomarnos un tiempo para relajarnos y disfrutar. Hay que aplicar más eso de mens sana in corpore sano. ¡Mil besos!

PD: Si queréis probar la nueva gama Dove DermaSpa, estad atentas al concurso que Dove realizará en sus redes sociales :)