Ya os lo he mencionado en varios posts por encima y también en Instagram Stories, pero a raíz del embarazo de #missOlivia, mi vista cambió y no la he recuperado. Os cuento un poco mejor y en profundidad. Si hoy os hablo de este tema, la vista, es porque, dado que he vivido todo este cambio «recientemente» en primera persona, creo que es muy importante darle la atención que se merece. Cuando me quedé embarazada, como buena madre primeriza, estuve leyendo sobre todos los cambios que suceden y esos posibles y aleatorios efectos secundarios que de vez en cuando se dan. Entre ellos, leí sobre cómo podía afectar a la vista en caso de mujeres con distintas patalogías (miopía/astigmatismo/hipermetropía) y que aunque podían agravarse e incluso mejorarse, todo era temporal y una vez pasada la cuarentena lo normal es que todo volviese a su origen. No fue hasta que estaba de 6-7 meses cuando empecé a notar que veía un poco peor, que necesitaba fijar la vista más y que ya no podía leer los subtítulos de televisión si no forzaba mucho la vista. Se lo comenté a mi obstetra y me dijo que era algo normal y común, que no representaba ningún riesgo o inquietud y que todo se debía en gran parte a la retención de líquidos que afecta a todas las mucosas… No podíamos estudiar nada hasta que al menos no pasara la cuarenta post-parto, que es más o menos el tiempo que tarda nuestro cuerpo en volver a “su ser”. Conforme pasaban los meses sentía que iba a peor, y llegó un punto en el que tuve que dejar de conducir porque sentía que no controlaba la situación y me agobiaba.

 Pasé el postparto y mis problemas de vista no iba más que a más, así que llegados a este punto, había que tomar cartas en el asunto y hace pruebas. Pero claro, yo por entonces era mamá de una bebita recién nacida que necesitaba todo mi tiempos y mis días e ir al médico y cuidarme estaba en el último puesto de mi lista de prioridades. Para cuando quise darme cuenta, ya había pasado más de un año y yo no veía ni tres en un burro –literal- y de pronto me di cuenta de lo condicionada que estaba viviendo. Había perdido independencia, era imposible conducir, por la noche casi no veía y me tropezaba porque no veía escalones o pequeños baches; cuando Olivia se alejaba, yo no podía ver su cara o intuir si me miraba o se estaba riendo; no reconocía a nadie por la calle hasta que lo tenía frente a frente… Me hice una primera graduación en Septiembre pero no acabé de hacerme todas las pruebas hasta que en Diciembre tuve un pequeño susto (cuando os conté que empecé a ver formas geométricas) y me di cuenta de lo inconsciente e irresponsable que había estado siendo. Como mi madre me dice siempre, con la salud y con la vista no se juega, que es muy delicada. Sólo os diré que la graduación me aumentó en 3 meses 0.5 y ahora mismo tengo 2.5 de miopía + 0.75 de astigmatismo en cada ojo. Cuando fui por segunda vez al oftalmólogo a terminar las pruebas pendientes, no se creía que estuviese viviendo así…

- Disclaimers legales y avisos de producto en la web www.mejorconlentillas.com

Os cuento todo esto porque es muy importante cuidarse durante el embarazo, tomar conciencia de nuestro cuerpo y de nuestra salud e incluso cuando nazca nuestro bebé, seguir recordándonos que somos personas con necesidades. No nos podemos dejar en un segundo plano.  Una frase que he leído muy a menudo desde que soy mamá y que me parece super acertada: mamá feliz, bebé feliz. Y ese es el orden correcto: mamá – bebé. Y por supuesto, si no estáis embarazadas también, porque lo más probable es que no sea algo demasiado importante, pero es mejor quedarnos tranquilas. Ni que decir tiene el cambio que he experimentado desde que me he graduado la vista… ¡La de cosas que me estaba perdiendo! No era consciente… No tengo palabras porque mucha gente que a estas alturas tiene una vista perfecta, no piensa que de un día para otro todo puede cambiar y gente que hoy usa gafas/lentillas siempre lo ha hecho y a lo mejor no recuerda con una edad tan adulta cómo es este cambio…

El caso es que me hice unas gafas graduadas, las redondas doradas que os he enseñado, y las lentillas formaba de ese plan B para cuando las gafas no me apeteciesen. Estaba super convencida de que me resultarían más cómodas las gafas y las lentillas las veía un poco engorrosas… Sin embargo, fue hacer una prueba y decir “¡quiero lentillas!”. Desde luego ambas cosas pueden ser complementarias, pero las lentillas son un gustazo. Te olvidas de que existen –y si me apuras, de que ves mal- porque lo que llevaba peor es estar quitándome y poniéndome las gafas a ratos porque acababa super mareada. No voy a negar que al principio las lentillas cuestan, resultan algo raro porque no estamos acostumbrados a esa sensación, tardas muuucho tiempo en ponértelas y hasta se hace raro eso de ver pero sintiendo que no llevas nada. Pero creedme que en cuestión de minutos todo pasa y lo peor es cuando por la noche te las quitas y vuelves a la cruda realidad ;)  Y porque puede pasar que algunas estéis en mi situación o que no sepáis cómo funciona esto de las lentillas, lo que os voy a contar a continuación seguro que os va a encantar :) Entrad en la web Mejor con lentillas y podréis conseguir un par de lente de prueba gratis. Cuando recojáis vuestro par en la óptica que hayáis elegido, haceros un selfie y subidlo a Instagram con los hashtags de la campaña #MiNuevoYo #FanDeLasLentillas. Entraréis en el sorteo semanal de premios directos y además podréis convertiros en la próxima embajadora de la marca!!

De momento estoy usando estas lentillas diarias, que están pensadas para llevarlas todo el día y desecharlas. También existen las lentillas mensuales y las que están pensadas para que duren algunos años, aunque de momento me quedo con las diarias y son las que la mayoría de la gente, incluida la óptica, me ha recomendado. Son más cómodas, menos rígidas, más higiénicas y fáciles de usar! Si un día no te apetece usarlas, no pasa nada. Aunque puede ser que a largo plazo, me termine pasando al formato mensual ;)

*Este post está patrocinado por Alcon, aunque todas las opiniones y testimonios vertidos en él son mias en las que ni la marca ni nadie ha interferido. Es mi experiencia 100% real. 

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// OUTFIT DETAILS //

Mono/Jumpsuit – Zara (AW 16/17)

Top – The Amity Company (old)

Choker – Lowlita&You

Pendiente/Earrings – Lowlita&You

Esmalte/Nail polish – Rimmel London 60′ #310 Double Decker Red

Labios/Lips – Sensai Silky Design Rouge tono Hiiro