Ha pasado muuucho tiempo desde la última vez que os di los buenos días y hoy por fin os presento de manera oficial a Bruno, o como ya le hemos apodado #DonBruno. Desde que supe que estaba embarazada y vimos cuando cumplía las 40 semanas, sólo pensábamos una y otra vez que por favor naciese cualquier día excepto el 14; prefería que cada uno tuviese su día especial. Cosas del destino, nació finalmente el mismo día que #missOlivia -14 de agosto- y con tan sólo una hora de diferencia. Supongo que ahora ambos tienen una bonita y curiosa anécdota que contar :)
De todo el tiempo que estuve embarazada, creo que no dediqué ni un 20% a pensar o imaginarme como sería Bruno. Es más, nosotros deseábamos que fuese otra niña, así que desde el principio nos dirigíamos a él como “bebé” por aquello de no llamar a la mala suerte… Y tanto nos acostumbramos, que quedaban días para que naciese y aún nos referiamos a él como “el bebé”. Con otro hijo por medio y cuando sólo conoces el mundo del hijo único, cuesta pensar en cómo será la vida cuando sean dos los que aprendan que tiene que compartir tu amor y cariño. Mentiría si no dijese que pensaba que era imposible que lo quisiera tanto como quiero a Olivia, pero lo cierto es que sí, aún queda mucho amor en mi interior. A ratos hasta me siento mal por haber llegado a pensar lo contrario! Pero es que esto de convertirte en madre, sin duda alguna, es una carrera de fondo y bastante larga. Creo que nunca llegaré a sabérmelas todas, nunca alcanzaré el nivel máximo en maternidad y por supuesto, siempre habrá algo nuevo en el camino que aprender…
En cuanto al parto, como os dije por Ig Stories, se complicó en el último momento y la recuperación postparto ha sido más durilla y dolorosa. Amanecí el 14 de agosto con ligeras contracciones y a la hora le dije a Salva que nos fuésemos arreglando por si acaso, aunque estaba convencida de que sería una falsa alarma o eso quería pensar… Llegamos al hospital a las 10 de la mañana con contracciones regulares y constantes, y la sorpresa vino cuando al explorarme, me dijeron que estaba dilata de 8’5 cm (llegué para que me pusieran la epidural de milagro). Nos quedamos todos boquiabiertos, ninguno de los que estábamos en la sala de urgencias de ginecología lo podíamos creer, y yo feliz. Sabía que iba a ser coser y cantar porque las contracciones las estaba llevando de miedo, me dolían pero no sé si es que eran menos dolorosas que cuando Olivia o que la experiencia me ayudó, pero las supe llevar fenomenal y además estaba muy descansada y relajada. Todo estaba a mi favor, porque además mi primer parto fue bueno y sin puntos ni nada. El problema vino cuando vieron que Bruno estaba mirando hacia arriba en vez de hacia el suelo, y me quedé una hora de lado para ver si dábamos tiempo a que se terminase de girar del todo. Cuando llegó el momento de empezar el trabajo de parto, parecía que se había girado un poco pero no… Tocó empujar y yo sentía que íbamos a ninguna parte. Estuve dos horas empujando y nada y finalmente tuvo que ser un parto instrumental y me tuvieron que dar muchos puntos. Recuerdo que con Olivia rogaba que por favor no me cortasen, y esta vez cuando vi a mi ginecóloga con las tijeras, ni se me pasó por la cabeza decirle que no. Me habían puesto ya 2-3 dosis de refuerzo de la epidural y no toleraba más dolor ni presión. Recuerdo este último tiempo angustioso porque sentía que no había nada que yo pudiese hacer, estaba agotada y muy muy dolorida. Sólo pensaba en cuándo iba a acabar todo ésto y por fin apareció él… 3,500kg y 51cm de amor con olor a nuevo.
Y es que Bruno es un ángel caído del cielo literal. Eso y que la experiencia con Olivia fue tan, tan, tan intensa… que ahora nada me agobia y todo es pan comido, o casi todo! Quizás yo viví esa primera experiencia con tanto estrés precisamente por ser inexperta, pero siento que Bruno es tan fácil de llevar… Duerme bastante más que Olivia y a mi cada siesta suya me sabe a gloria, no tanto por dormir si no porque desconecto y es algo que necesito más que antes. Cuando sólo tienes uno, cuando descansa el bebé, tú puedes aprovechar ese tiempo para dedicártelo a ti; con dos y un perro, siempre hay alguien reclamándote. Conformen han ido pasando las semanas, muchas cosas han cambiado desde que nació porque a lo tonto… ¡Ya tiene más de un mes! Me parece increíble que haya pasado tan rápido este primer mes y algo me dice que ésto es sólo el principio… Todavía es demasiado pronto para decir cómo será Bruno, pero de momento solo hace dos tomas por la noche (la mayoría de ellas) y no da el rollo: se despierta, toma el pecho lo justo para volver a coger el sueño rico y volver a dormir. #nomepuedoquejar Lo curioso es que Olivia sigue despertándose cada noche, varias veces, llorando y llamándome, y siempre pienso lo gracioso que me resulta tener que despertarme por ella y no por él, aunque de gracioso tenga poco, porque se nos han dado algunas noches “drama” que mejor me quedo los detalles para mi ;)
En cuanto al resto, se intuye que va a ser un bebé más tranquilo que Olivia porque aunque dicen que no hay que comparar porque cada bebé es un mundo, es tan grande la diferencia entre ellos dos… Él es más tranquilo, dormilón y sobre todo comilón! Nada mas nacer era un clon de #missOlivia pero ha cambiado mucho en este primer mes y ya a penas me guardan parecido. Dicen que Bruno se parece más a mi, aunque yo para ser franca soy de esas que nunca encuentra parecidos en los bebés… Adora los baños, si no tiene hambre en ese momento, puedes intuir su cara y gesto de gusto al caerle el agua caliente. Y lo más curioso, al menos para mi, es que desde el tercer día de vida sabe la noche. No me preguntéis cómo es posible (yo pensaba que estas cosas no sucedían) pero llegan las 9 de la noche y como un reloj, reclama cenar e irse a dormir cual angelito :) ¿Y nuestra vida? Pues la verdad que no está yendo ni tan bien ni tan mal. Nos estamos acoplando y aunque hay días que digo “de esta no salgo”, la mayoría de los días conseguimos apañárnoslas para llegar al final del día con una sonrisa, muertos eso sí, pero con esa maravillosa sensación de que todo funciona.
En fin, tengo la sensación de que tengo tantas cosas que contaros que no consigo decirlo todo de manera ordenada, así que iré tratando determinados temas y experiencias poco a poco. De momento os prometí un haul con todas esas compras que hice para Bruno y que me han gustado mucho (y haré comparación con lo que compré cuando Olivia) y también hablaré en otro post cómo están siendo todos estos cambios para Olivia, aunque os adelanto que ella de momento celos no ha mostrado y ADORA a su hermano, no deja de hablar de él! Tengo algunos temas más pensados y que poco a poco veréis, pero todas vuestras sugerencias son más que bienvenidas :)
¡Mil besos!